A veces el tango duele, aprieta el corazón porque posee lo que todos tenemos: pasión, amor, dolor, por lo mismo tiene vida a torrente, tiene sangre que circula. Porque la vida -creo- no es tan apacible como la deseamos siendo la única posible, la nuestra que nos hace pensar, sentir, desear, gozar, oler, deglutir gustando esa comida preparada con prelación. La vida nos hace compartir con otro u otra y entonces florece más vida y nos llaman papás y después abuelos. Somos felices aunque también sufrimos y mucho. Y nos equivocamos y volvemos a empezar mejor porque los tropezones educan haciéndonos más fuertes y más sabios.
No soy fanático del tango, como lo son algunos de mis amigos, ni siquiera lo he bailado, pero me toca y lo siento, me apena y me anima, especialmente en una hora sagrada de cada semana. Quisiera que disfrutaran de uno, por los menos de su letra. Letra y música tienen manos de mujer y eso es importante pues la mujer suele ser más optimista que los hombres, como este tango. La mujer siempre apuesta por la esperanza, por lo nuevo; Nosotros los varones pensamos quizás demasiado y perdemos la premisa de la ocurrencia, dejamos pasar el brote para quedarnos con la flor y a veces ni siquiera adivinamos su fragancia. Tal vez cargamos con la enseñanza infantil que nos obligaba a los niños a realizar todo bien, que hoy -en nuestro trayecto- esperamos que nos digan cómo salió el discurso o el poema o el guiso y hasta si todavía somos efectivos para el amor. No pretendo crear una distancia entre hombres y mujeres, todo lo contrario, pero sostengo que ellas tienen una consigna que las sostiene: Saben disfrutar de la vida, de toda la vida, de su propia existencia en su cuerpo y alma. A nosotros nos queda aprender de ellas porque ellas nos han observado desde hace siglos cuando vivían bajo nuestra sombra fuerte e injusta. Incluso ahora, en muchas lugares levantamos la férula de la melodía que queremos escuchar.
Bien. Que venga ese tango -o tango canción como es este- que para bailarlo se necesitan dos. pero para escucharlo sólo tú en tu soledad o compañía, o con tus alas desplegadas batallando contra el viento frío o caliente.
A PESAR DE TODO
Letra y música de Eladia Blázquez
A pesar de todo, me trae cada día
la loca esperanza, la absurda alegría.
A pesar de todo, de todas las cosas,
me brota la vida, me crecen las rosas.
A pasar de todo me llueven luceros
invento un idioma diciendo... "te quiero".
Un sueño me acuna y yo me acomodo
mi almohada de luna a pesar de todo.
A pesar de todo la vida que es dura,
también es milagro, también aventura.
A pesar de todo irás adelante.
¡La fe en el camino será tu constante!
A pesar de todo, dejándola abierta,
verás que se cuela el sol por tu puerta.
No hay mejor motivo, si encuentras el modo,
de sentirte vivo... ¡A pesar de todo!
A pesar de todo estoy aquí puesta,
los pájaros sueltos, el alma de fiesta.
A pesar de todo me besa tu risa.
Y el duende y el ángel del vino y la brisa.
A pesar de todo el pan y la casa,
los chicos que crecen jugando en la plaza...
A pesar de todo la vida ¡qué hermosa!
Siempre y sobre todo, de todas las cosas.
No soy fanático del tango, como lo son algunos de mis amigos, ni siquiera lo he bailado, pero me toca y lo siento, me apena y me anima, especialmente en una hora sagrada de cada semana. Quisiera que disfrutaran de uno, por los menos de su letra. Letra y música tienen manos de mujer y eso es importante pues la mujer suele ser más optimista que los hombres, como este tango. La mujer siempre apuesta por la esperanza, por lo nuevo; Nosotros los varones pensamos quizás demasiado y perdemos la premisa de la ocurrencia, dejamos pasar el brote para quedarnos con la flor y a veces ni siquiera adivinamos su fragancia. Tal vez cargamos con la enseñanza infantil que nos obligaba a los niños a realizar todo bien, que hoy -en nuestro trayecto- esperamos que nos digan cómo salió el discurso o el poema o el guiso y hasta si todavía somos efectivos para el amor. No pretendo crear una distancia entre hombres y mujeres, todo lo contrario, pero sostengo que ellas tienen una consigna que las sostiene: Saben disfrutar de la vida, de toda la vida, de su propia existencia en su cuerpo y alma. A nosotros nos queda aprender de ellas porque ellas nos han observado desde hace siglos cuando vivían bajo nuestra sombra fuerte e injusta. Incluso ahora, en muchas lugares levantamos la férula de la melodía que queremos escuchar.
Bien. Que venga ese tango -o tango canción como es este- que para bailarlo se necesitan dos. pero para escucharlo sólo tú en tu soledad o compañía, o con tus alas desplegadas batallando contra el viento frío o caliente.
A PESAR DE TODO
Letra y música de Eladia Blázquez
A pesar de todo, me trae cada día
la loca esperanza, la absurda alegría.
A pesar de todo, de todas las cosas,
me brota la vida, me crecen las rosas.
A pasar de todo me llueven luceros
invento un idioma diciendo... "te quiero".
Un sueño me acuna y yo me acomodo
mi almohada de luna a pesar de todo.
A pesar de todo la vida que es dura,
también es milagro, también aventura.
A pesar de todo irás adelante.
¡La fe en el camino será tu constante!
A pesar de todo, dejándola abierta,
verás que se cuela el sol por tu puerta.
No hay mejor motivo, si encuentras el modo,
de sentirte vivo... ¡A pesar de todo!
A pesar de todo estoy aquí puesta,
los pájaros sueltos, el alma de fiesta.
A pesar de todo me besa tu risa.
Y el duende y el ángel del vino y la brisa.
A pesar de todo el pan y la casa,
los chicos que crecen jugando en la plaza...
A pesar de todo la vida ¡qué hermosa!
Siempre y sobre todo, de todas las cosas.
A Pesar de Todo
En la voces de Susana Rinaldi y Raúl Lavié
Vicente Corrotea
El tango. Un sentir nostálgico hecho para el turismo... de algo que no se vive en Buenos Aires.. la Tierra que amo ... El lugar donde nací...
ResponderEliminarSaludos desde
La bella Miami
Comprendo, amiga Mucha, que el tango de hoy no es el mismo de antes que nos hacía llorar pero aún vive...
EliminarUna abrazo para ti.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
EliminarTampoco bailo el tango, Vicente, porque el hacerlo requiere de un grado de gran destreza del que carezco. Sin embargo desde mi infancia me conmueven letras como las de "al compás del corazón" o "uno", e incluso "el sueño del pibe", de tiempos en que en Argentina campeaban orquestas y cantantes de calidad suprema, nunca repetidos. Hablo de las de Miguel Caló, Alfredo de Angelis o Francisco Canaro. Por aquella época, los años 40, todavía las radioemisoras de Chile difundían con profusión las canciones de Gardel todos los días y a toda hora.
ResponderEliminarAdhiero también a tu predilección al tango que publicas, porque a pesar de todo...la vida es bella, como pregona la película de ese nombre, alejada del tango, pero muy aleccionadora.
Agradezco tu comentario pues me ha llevado a mi infancia en Quillota (la menciono porque tú la conoces). Era un pueblo en aquellos años en que la gente hablaba y pensaba en modo de tango. Allí aprendí a silbarlo y alguna vez me detuvieron para decirme que lo hacía muy bien.
EliminarCosas de la vida.
Abrazos.
Fíjate Vicente que a mí me encanta ver bailar tango. Escucharlo, sentirlo, imaginar que estoy en Corrientes (nunca he ido, pero allí me imagino, jaja) deleitando a un público, en algún escenario. Siempre me ha gustado el baile. En una ocasión estábamos un grupo celebrando un cumpleaños y hacían dinámicas diversas en el local. Anunciaron, la pareja que baile mejor el siguiente tango, no paga la cuenta de su mesa. Varias parejas subieron al escenario. Un amigo y yo ganamos.
ResponderEliminarLuego, me preguntaron entre los amigos, cuándo aprendiste... qué, qué... les dije, si yo nunca había bailado tango, yo lo que quería era nuestra cuenta gratis, jajaja.
La vida, Vicente... es un tango, es pasión. La pasión es tango.
Besos.
Y hay que decirlo: También el tango es sensual y lleva al secreto, a la confidencia mucho más que otros bailes. Se siente -me han dicho- atractivo, atrevido.
EliminarUn abrazo, Sara del alma.
A pesar de todo la vida es la vida... y se aprende de ella después de vivida. Los tangos son novelas de cuatro o cinco minutos que escuchaba de joven y aún de vez en cuando.
ResponderEliminarUn abrazo.
Sí. El tango no pasa inadvertido porque mueve la vida y la vida al tango.
EliminarPero sigue componiendo tus propias canciones que esperamos las publiques de vez en cuando.
Abrazos.
Que bueno toda esta forma de sentir
ResponderEliminarDe confirmar por igual nuestra propia mirada De vida y se agradece
Porque a veces se siente tan cotidiano todo que llega a aburrir y sin embargo uno se da cuenta que a cada momentos suceden cosas cerca de uno que le permiten seguir gozando y sintiendose en los pequeños placeres y de esa manera encontrar motivos para sentir latir la vida en cada paso que da.
Estés muy bien.
💝🐦🍃😀🌺🤗🌷
Claro que sí, Magdeli: La vida con tango o sin él puede ser dura como también inapetente. Pero el hogar o el exterior puede brindarnos alegrías como las camelias que aman el invierno que se va yendo acá, en el centro del país, donde derramó escasa agua. Son los pequeños placeres, como dices. También leer los poemas de Rolando Cárdenas que tú conoces como yo.
EliminarOjalá sobrevivas al mes de septiembre.
El día 18 de septiembre es el día de fiesta patria en Chile que se celebra con todo el entusiasmo. Por eso puse a Magdeli que ojalá sobreviviera al mes de septiembre, porque son varios días. Y muchas maneras de pasarlo bien.
EliminarFelicidades a mis amigas y amigos coterráneos.
Bello poder bailar tango..yo no se bailar.....bellas letras ... un placer leerte..saludos
ResponderEliminarGracias, Sandra, por llegar a mi blog. También he ingresado al tuyo y me han gustado tus poemas. Son buenos. Espero que nos sigamos viendo. Abrazos.
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